Una de cal...

Que majos estos escoceses. Tras la primera reserva de alojamiento, mail de bienvenida (aparte del copazo de whisky de la región que aseguran ofrecer al visitante al llegar) confirmando la reserva y asegurando lo encantados que estarán de recibirme (estos no me conocen). Esta es la de cal.

¿La de arena? Las cosas del idioma, que, pese a tratarse de un B&B, creí estar reservando habitación con baño para mi solito, y pequé de optimista: lo comparto con otra habitación (Recordatorio: meter en el maletero del coche el Pato WC, just in case). Estoy casi seguro de que la habitación sí es individual.

Sin duda, este tipo de viaje es una oportunidad para conocer gente nueva, y está visto que alguna en unas circunstancias de lo más íntimas. Yo esperaba tener que ser majo en los pubs para entablar conversación, y resulta que voy a poder hacerlo antes de lavarme los dientes...

Además, ya me han avisado que tengo que hacer el check-in en determinados horarios, porque el resto de horas están sacando al perro, haciendo recados por el pueblo, etc, y el día de mi llegada tienen un evento familiar por la noche. ¡Qué pasada, vuelvo a tener 15 años y una host family con perro! ¿Me darán pack lunch para la excursión del día siguiente?